El Lugar de La Mancha

«En un lugar de La Mancha, de cuyo nombre no quiero acordarme, no ha mucho tiempo que vivía un hidalgo de los de lanza en astillero, adarga antigua, rocín flaco y galgo corredor…»

Así comienza El Quijote de Miguel de Cervantes Saavedra, la novela más universal de la literatura en lengua castellana y una de las más traducidas en todo el mundo, con su primera parte El ingenioso hidalgo don Quijote de la Mancha publicada en 1605, y su segunda titulada El ingenioso caballero don Quijote de la Mancha que vería la luz en 1615. Sin embargo, la pregunta que durante cuatro siglos ha supuesto todo un enigma literario no podía ser otra que…  ¿Cuál era ese lugar de la Mancha al que se refería Cervantes?

En el 2005 con motivo del IV centenario de la publicación de la primera parte del Quijote, un equipo científico multidisciplinar de la Universidad Complutense de Madrid, integrado por diez expertos en Geografía, Historia, Filología, Sociología, Matemáticas y Ciencias de la Información, dirigido por los catedráticos de Sociología Don Francisco Parra Luna, de Relaciones Internacionales Don Santiago Petschen y el literato don Manuel Fernández Nieto publicaron un estudio interdisciplinar bajo el título ‘El lugar de la Mancha es… El Quijote como un sistema de distancias/tiempo’ postulando a Villanueva de los Infantes como el lugar de la Mancha escogido por Cervantes como patria pequeña de don Quijote y Sancho. Los anales de la historia determinan a esta villa como el gran foco espiritual de La Mancha en el Siglo de Oro.

El Quijote por el Campo de Montiel

Cervantes inmortalizó La Mancha, región natural e histórica situada en el centro de España, en la actual comunidad autónoma de Castilla-La Mancha; dando a don Alonso Quijano el sobrenombre de don Quijote de La Mancha. Eligió La Mancha y dentro de ella el «antiguo y conocido» Campo de Montiel, comarca donde inicia don Quijote sus aventuras.

En el prólogo Cervantes advierte al lector:

La historia del famoso Don Quijote de la Mancha, de quien opinión, por todos los habitadores del distrito del campo de Montiel que fue el más casto enamorado y el más valiente caballero que muchos años a esta parte se vio en aquellos contornos» (Prólogo).

Inicia la Primera Salida en el Campo de Montiel, no sale del distrito:

Y comenzó a caminar por el antiguo y conocido Campo de Montiel y era verdad que por él caminaba.(Parte I, Cap. II).

Inicia la Segunda Salida también en el Campo de Montiel., aunque esta vez transcurrirán sus aventuras por parajes de La Mancha y Sierra Morena:

Acertó Don Quijote a tomar la misma derrota y camino, que él había tomado en su primer viaje, que fue por el Campo de Montiel. (Parte I, cap. VII).
Pisó por ella el uno y el otro lado de la gran sierra Negra y el famoso Campo de Montiel, hasta el herboso llano de Aranjuez. (Parte I, cap. LII).

La Tercera Salida la inicia de nuevo en el Campo de Montiel. Recorre otros paisajes de La Mancha, vuelve al Campo de Montiel -Las Lagunas de Ruidera, Cueva de Montesinos-, Aragón, Barcelona, y finalmente regresa de nuevo don Quijote a su pueblo:

 Y pongan los ojos en las que están por venir, que desde agora en el camino del Toboso comienzan, como las otras comenzaron en los Campos de Montiel.(Parte II. VIII).

 

Esculturas de Don Quijote y Sancho en la Plaza Mayor de Villanueva de los Infantes
Casa del Caballero del Verde Gabán en la Calle Cervantes

En la Plaza Mayor de Villanueva de los Infantes desde todos los ángulos se capta entre real y abstracto el monumento a don Quijote y Sancho, uno con su caballo Rocinante, el otro con su rucio; obra del escultor local Juan Antonio Giraldo. A tan solo unos pasos, en la Alhóndiga, se encuentra la Biblioteca Municipal que acoge una sección dedicada al Siglo de Oro, destacando las obras de tema cervantino.

 

En la calle Cervantes, se encuentra la Casa del caballero del Verde Gabán, la cual parece ser la inspiración para la morada de Don Diego de Miranda, descrita en el capítulo XVIII de la segunda parte bajo el título De lo que sucedió a Don Quijote en el castillo o casa del caballero del Verde Gabán, con otras cosas extravagantes. Se relata la escena de la velada literaria entre don Alonso Quijano y el joven poeta don Lorenzo, hijo de don Diego de Miranda:

 

Halló don Quijote ser la casa de don Diego de Miranda ancha como de aldea; las armas, empero, aunque de piedra tosca, encima de la puerta de la calle; la bodega, en el patio; la cueva, en el portal, y muchas tinajas a la redonda, que, por ser del Toboso, le renovaron las memorias de su encantada y transformada Dulcinea.

 

Después de cuatro días en casa de don Diego, don Quijote decide antes de proseguir el camino a Zaragoza que

…había de entrar en la cueva de Montesinos, de quien tantas y tan admirables cosas en aquellos contornos se contaban… 

Dispuestos en el camino encontraron con dos estudiantes y dos labradores, y son invitados por uno de ellos a ver unas de  las mejores bodas y más ricas que hasta el día de hoy se había celebrado en la Mancha. Varios autores han especulado sobre la posibilidad de cuál fuera la boda que inspirara a Cervantes el episodio de las Bodas de Camacho (Don Quijote, II, cap. XX y XXI).

 

Texto: Mª Ángeles Jiménez García